18 agosto 2012

Hubo un tiempo en que en una mañana podía rellenar de basura literaria un cuaderno entero. Esta sobredosis (de letras y otras cosas) tiene como consecuencia que ahora dificilmente puedo escribir algo de mas de 5 versos o 5 frases. La extensión importa poco en éste caso, la basura siempre será basura.
Todo lo necesario ya quedó dicho entonces. La espiral solo sigue funcionando dentro de mi cabeza y es una terrible pérdida de tiempo llevarla al papel-cubo indefinidamente.

Cerca del final, donde siempre te esperaré ...


1 comentario:

mareva mayo dijo...

ah la espiral que sus más bellos sonidos retumbaron el mundo, cuando teníamos 7 o 15 o 20, antes de querer morir o justo cuando queríamos con todo el mar
pero señor del misterio, la inutilidad es la única razón
y tus papeles llevan la sangre y los sueños.